Hasta pronto querido amigo

Querido amigo, ya hace un tiempo que has partido en tu viaje, y te debía una despedida, no me despedí de ti como mereces. De alguna manera tu y yo supimos estar en paz, yo al fin supe pedir perdón y como no podía ser de otra forma tu supiste perdonar, fue tan poco y tanto lo que nos dijimos, fue tanto lo que aprendí, tanto lo que me enseñaste.

No sería justo recurrir a los tópicos al hablar de ti, no te lo mereces, mereces que todas las frases sean originales y auténticas al igual que lo fuiste tú, algo muy bueno debimos hacer todos los que te conocimos para merecer conocer y dar paso en  nuestra vida a alguien con tanto que dar, desde luego a nosotros nos queda mucho por aprender, posiblemente tu ya habías terminado tu trabajo aquí y nos has dejado para ir hacía otro lugar, allí debían estar escasos de ángeles cuando se han llevado al nuestro.

De carácter fuerte, ideas claras, gran inteligencia, siempre más preocupado por los demás que por ti, ahora somos nosotros los que debemos preocuparnos de ti, de tu memoria, de recordarte, ahora que puedes ver el interior de nuestro corazón sabrás todo el cariño que te has llevado, cada día te tendremos presente, mientras tomamos un café largo.

Querido amigo, Aupa Rua!! allí desde donde nos estés viendo diciendo: Señora!! solo puedo decirte hasta pronto querido amigo, gran hombre el Sr. Roberto Rua, al cual hoy desde aquí espero inmortalizar para siempre y que todos y cada uno de los que le conocimos podamos decir orgulloso, SÍ!! Yo conocí a Roberto Rua!!

Mi anécdota del día de hoy...

El ser humano es extraordinario:

Hoy como buena fumadora empedernida, en cuanto he terminado mi trayecto en metro he sacado un cigarrillo, toda emocionada ante la idea de echar un poco de humo antes de empezar la jornada laboral, justo en ese momento mi aliado para esta tarea, el encendedor, me ha fallado.

Ante esta situación solo hay un recurso posible, mirar rápido tu entorno, localizar un fumado y abordarlo con: - Disculpe tiene fuego?

Normalmente te miran con esa expresión tan característica de me estás molestando, no me apetece buscar en que bolsillo lo he guardado, pero te voy a perdonar la vida, toma aquí tienes fuego. Pero hoy ha sido diferente, el rostro del hombre al que me he dirigido era sonriente, afable, con predisposición a buscar sin que le suponga un esfuerzo. Rápidamente ha sacado del bolsillo de su camisa un mechero, me lo da, enciendo con ansias y prisa, sin prestar demasiada atención al encendedor, para no seguir molestando, y hago el gesto de devolvérselo, cual ha sido mi sorpresa??... al hacer el gesto él con una expresión sonriente me dice: -No te preocupes, te lo puedes quedar, tengo otro de recambio. Increíble!! Vaya el ser humano es extraordinario, que persona tan amable.

Le respondo un gracias acompañada de una de mis mejores sonrisas, y retomo mi camino hacia el trabajo, pensando todavía en lo que me acababa de suceder, normalmente, no sé si a vosotros os sucede, cuando recuerdo un hecho relacionado con un objeto vuelvo a coger el mismo observándolo con detenimiento y me acompaña en el recuerdo.

Justo en ese momento de mayor concentración, puedo comprobar el logotipo y el nombre impreso en el encendedor que me acaban de regalar, imaginaros mi sorpresa, ha sido tal que he podido notar hasta como mis ojos se abrían casi hasta dolerme los parpados y la boca se me quedaba abierta, observo bajo ese fondo verde oscuro con letras y logotipo dorado “EGEA – SEX SHOP” …

Lógicamente me ha venido de nuevo la expresión del hombre que me lo había regalado, y deje de ver una facción afable para imaginarlo como un ser babeante delante de millones de películas y revistas pornográficas, acompañadas de juguetitos varios… y evidentemente todo el día lo he pasado escondiendo el encendedor, y si alguien me pedía fuego la respuesta era clara, NO!!! Que otra cosa podía hacer?... imaginaros la cara de aquellos personas, y lo que pueden pensar, cuando les entrego ese mechero, en qué lugar quedo?? Y claro, explicar la historia a todo aquel que se me acerque a pedirme fuego, pues, la verdad es demasiado rocambolesca, si me contarán a mi semejante película desde luego no sé si me la creería.

Así que bueno, está ha sido mi anécdota del día, que desde luego recordaré por mucho tiempo.

Querida amiga...

Os voy a contar una historia, una historia de vida, una realidad, esto es un homenaje a una mujer, a una gran mujer, que hoy se siente pequeña, que mira atrás con lagrimas en los ojos, que se encuentra cada noche con todos sus temores y sus fantasmas del pasado, una mujer que siente que el mundo la ha olvidado, que  asume cargas que no le corresponden. 

Querida amiga, sé que ahora no lo ves, que la tristeza te ha puesta su venda, pero no tengas miedo y retíratela,  no tengas miedo, mira te duelen los ojos, pero no es de llorar es porque jamás los has utilizado, mira a tu alrededor y date cuenta de todo lo bello que te rodea, convéncete de que formas parte del mundo, que ahora abrazas la libertad de nuevo, vuela y siente que el mundo es tuyo que ya no eres presa del ayer o de lo que debería ser, ahora tú decides, olvida lo que podías haber vivido pues lo que te queda por vivir es mucho más hermoso que lo que has vivido, toda una vida está por delante esperando a que la vivas. 

Ahora es el momento de que construyas nuevos recuerdos, dale la bienvenida a esta gran oportunidad de reinventarte a ti misma, estaremos a todos a tu lado disfrutando de ver como andas este nuevo camino con paso firme, con la cabeza bien alta, mirando desafiante el futuro, te vemos tal y como eres, con tus pocos defectos y tus grandes virtudess, con esas diferencias que te convierten en alguien realmente especial. 

Lo más hermoso del pasado es que jamás volverá, que solamente queda lo aprendido, el presente es extraño pues es efímero,  pasa con tanta brevedad para convertirse en pasado que merece que lo sintamos con intensidad, y el futuro es esa gran sorpresa que nos renueva la ilusión, mi querida amiga no permitas que la melancolía se mude a tu corazón, permítele únicamente una breve estancia, y adelante que la vida es un lugar emocionante en el que estar. 

Vive, querida amiga vive…

GUATEMALA!! BASTA YA!!

Tengo el corazón dividido, mi madre es chapina y mi padre catalán, y amo a Guatemala como amo a Cataluña, son mis dos madres, mis dos tierras, y me parte el alma ver lo que he visto este pasado mes de agosto, tras pasar un mes en mi querida Guatemala. Negaciones de lo evidente, que el pueblo está sufriendo, que el pueblo está gritando en silencio, corrupción, narcotráfico, inseguridad, hambre… y yo hago un llamamiento al espíritu chapín, ese espíritu de lucha que les caracteriza!!!
No permitamos que borren a golpe de dólar la realidad, recordemos que el pueblo tiene el poder, recordémosles a los políticos que ellos están ahí porque el pueblo les ha puesto ahí, y que con la misma determinación les podemos arrebatar la silla en la que cómodamente se sientan a ver como Guatemala llora!!!! No hay gobierno que pueda contra el alzamiento de todo un pueblo. Así que fuerza y lancémonos a gritar a los que pretenden convertir nuestra Guatemala en su pequeño parque de negocios sucios, que no se siga enriqueciendo nadie más a costa de un pueblo, BASTA YA!!!

LA PEDRERA, BARCELONA Y EL CAFÉ DE GUATEMALA



Los fondos que permitieron a la familia Milá encargar al arquitecto Antonio Gaudí una gran casa modernista en el lugar donde hubo el límite entre la vida de Gracia y la ciudad de Barcelona salieron de un cafetal de Guatemala. La correa de transmisión entre esa fortuna salida de America Central y el emblemático edificio de paseo de Gracia es un personaje singular llamado Josep Guardiola y Grau, la vida del cual fue especialmente intensa, porque, entre otras cosas, se caso con una chica a la cual le triplicaba la edad, se invento un idioma para mercantes y navegantes fruto de la mezcla de seis lenguas, ideo varios inventos para mejorar la producción de café y fue unos de los principales accionistas de la obra de ingeniería más grande del mundo.

Muchas etapas de la vida de Josep Guardiola son todavía un misterio, pero se sabe que nació en Aleixar un pueblecito de los alrededores de Reus, hacía el 1831. Antes de cumplir los veinticinco ya lo encontramos en Guatemala, donde los tradicionales cultivos del añil y grana para las industrias del tinte europeo eran substituidos por el nuevo furor del café. En menos de diez años Guatemala quedo cubierta por completo de aquel fruto rojo que brota de las matas de cabe cuando llegan los meses de noviembre y diciembre. Guardiola compró una finca en San Pablo Jocopilas, en la Bocacosta, a medio camino, y sobre todo a media altura, entre aquello que en Guatemala llaman tierra fría – altiplano de los maya - , y aquello que llaman – tierra caliente – la costa del pacífico. La finca se llamaba El Chocolá, no estaba demasiado lejos del lago de Atitlán, y dicen que de allí, gracias a la combinación de altura, lluvias y tierra volcánica, salían los granos de café de mayor cualidad de todo Centro América.

En las últimas décadas del siglo XIX Guatemala era el principal exportador mundial de café, incluso por delante de Brasil y Colombia, y Guardiola se hizo de oro exportando a cualquier rincón del mundo los granos de café del Chocolá. Introdujo varias novedades en el proceso de elaboración y llegó a inventar una maquina, la guardiola, que era una especie de secadora automática para los granos de café. La guardiola fue un invento revolucionario para el sector, ya que permitía secar los granos de manera rápida y sin que quedaran agrietados, de forma que los consumidores europeos consideraban su café de mayor cualidad que el de sus competidores.

Hace falta suponer, que como hicieron otros cafetaleros, debió someter a los jornaleros autóctonos a trabajos forzados y a unas condiciones laborales prácticamente esclavistas. Como buen empresario, se anticipo a vender la finca antes de que los precios del café empezaran a caer, la venta a unos alemanes en el 1891 por un valor que multiplicaba por miles el precio por el cual había comprado, y volvió a Aleixar como unos de los indianos de mayor fortuna del país y como el mayor buen partido entre los solteros, a pesar de sus sesenta años.

Su fortuna todavía tenía que crecer más gracias a sus acciones encabezadas por el ingeniero Ferdinand de Lesseps que había conseguido el gran reto de abrir una inmensa grieta de costa a costa de Panamá, que revolucionaria el comercio marítimo mundial. El proyecto fue un estrepitoso fracaso, porque quedó paralizado después de diez años de obra, y después de veinte mil muertos entre accidentes de trabajo y fiebres tropicales, pero fue un éxito sin precedentes para inversores, porque los Estados Unidos acabaron comprando a la compañía los derechos de la concesión para la construcción del canal.

En Guatemala, Guardiola había tenido varios hijo, aunque solamente dos de ellos reconocido. Su hija Lola lo acompañó en su retorno a Cataluña. Fue precisamente Lola quien una noche de verano le presentó una amiga que conoció en Reus, y aunque entre Guardiola y Roser Segimon había una diferencia de edad de cuarenta años, afloro entre los dos un amor que acabo en matrimonio, en el cual la hija del novio era más joven la que la novia. Fueron los años más felices de la pareja, viviendo entre la vida en Barcelona, los viajes a Paris, los veranos en Blanes y las estancias de descanso en Aleixar, siempre acompañados del sequito de empleados.

En Barcelona la pareja se instaló en una casa del Pasaje de la Concepción. En sus últimos años el incansable Guardiola dedicó sus energías a idear un léxico y la gramática de un nuevo idioma universal que sirviera para comerciantes, viajeros y marineros. Consideraba que había una necesidad evidente de un idioma universal – aquel que consiga cubrir esa necesidad contribuirá al progreso de la civilización y hará un gran bien a la humanidad-, eran de hecho, los años en los que cuatro humanistas locos competían para la creación de su idioma orbe, en 1983 llegó a presentar en Paris una gramática (Gramatika uti nove prata – gramática de una nueva lengua), que era una mezcla de latín, inglés, francés, italiano, castellano y catalán. En su declaración de intenciones, Guardiola decía que la idea de un idioma universal se le ocurrió en América viajando entre los pueblos indígenas de los cuales no entendían el idioma, afirmaba que su lengua no venía a substituir ninguna otra.

Después de diez años de un feliz matrimonio, él murió y ella se quedó como señora de una de las mayores fortunas de Barcelona. En el 1903, mientras paseaba sus últimos recortes de duelo por el balneario Vichy, un joven Barcelones de buena familia y cierto aire de vividor, Pere Milá, se fijó en ella y empezó a diseñar sus planes. La alta sociedad utilizaba los balnearios como escenario y punto de reunión para encontrar pareja, donde las fortunas rivalizaban con los apellidos y los títulos como armas invencibles de seducción. En los círculos de la alta sociedad barcelonesa se extendió el rumor de que Milá se había casado dos veces: con la viuda de Guardiola y con la hucha de la viuda. (Guardiola palabra catalana que traducida al castellano significa hucha).

El matrimonio Milà – Segimon compró en el 1905 la torre que el señor Ferrer-Vidal tenía en la esquina del Paseo de Gracia y la calle Provença, de más de 1800 metros cuadrados de terreno. La pareja acordó construir un edificio de tres pisos, pero no coincidían en la elección del arquitecto, él insistía en contratar a Antonio Gaudí, que solamente unos metros más abajo hacía para entonces los últimos retoques para la Casa Batlló, pero a ella las formas de su paisano de Reus, le parecían poco apropiadas para sus gustos y posición.

Después de varias discusiones matrimoniales, ella acabó cediendo a contratar al Gaudí, rogándole al cielo que el arquitecto pusiera en su obra más juicio que no aquellas formas del demonio. En 1906 el arquitecto presento los planos a la pareja. En homenaje a la ama de casa, y tal vez también para pulir las diferencias con la señora Roser, Gaudí proyecto para la fachada una figura de la madre de Dios del Roser. Las obras duraron cuatro años y no estuvieron exentas de discusiones con el ayuntamiento de Barcelona. Cuando ya hacía dos años que duraban las obras, el consistorio ordenó parar el trabajo porque una columna ocupaba un metro la acera del Paseo de Gracia. Gaudí accedió a cortarla, tal y como pretendía el Ayuntamiento, pero amenazó con poner una placa que explicará quien era el causante de aquella columna cortada. Allí continúa la columna. También el terrado fue objeto de polémica, ya que el consistorio ordeno el derribo de las golfas en considerar que el edificio sobrepasaba los cuatro metros de altura permitidos. Gaudí, siempre tan obcecado, hizo valer su cabezonería una vez más, y hoy la ciudad de Barcelona goza de uno de los terrados más admirados de todo el mundo.

Con un coste aproximado de 600.000 pesetas de la época, la Pedrera quedó terminada acabado el 1910. Curiosamente, nunca no se llegó a poner la imagen de la Madre de Dios del Roser. Parece que consternados por los trágicos acontecimientos de la semana del 1909, el matrimonio consideró que una imagen de esas características podía poner en riesgo inútilmente delante de las iras de las masas obreras.

Es cierto que oficialmente era la Casa Milà, pero los Milà pusieron poca cosa más que los apellidos, porque la compra del terreno, los honorarios del arquitecto Antonio Gaudí, el transporte de las piedras desde el Garraf y el trabajo de los obreros, ebanistas, herreros, y escultores que participaron fueron pagados íntegramente con la fortuna que Guardiola había hecho en Guatemala y Panamá.

Roser Segimon vivió el resto de su vida en la Pedrera. Aunque el edificio nunca acabó de gustarle. Mantuvo la decoración por respeto a Gaudí, pero al morir el arquitecto, en el 1926, eliminó las formas modernistas y redecoró las habitaciones al estilo de Luís XVI. Murió en el edificio un día de junio del 1964. Tenía 93 años. Hacía 23 que había quedado viuda de Pere Milà y 63 que había enterrado a su primer marido, pero aunque el tiempo ha pasado a nadie de su círculo más íntimo no le pareció extraña su última voluntad, que sus restos reposaran en el cementerio de Aleixar al lado de su amor de juventud