Hola...y hasta luego!



Nos volvemos a encontrar, ciertamente ha transcurrido mucho tiempo desde mi última entrada en este blog, y no sé cuando será la próxima, pero procuraré volver a darle forma a este blog que tenía un poco olvidado.

Procuraré que mi mente se revolucione estirando de la palanca que tengo en mi cabezita, en la que se puede leer en uno de los extremos la palabra "creatividad", para que la máquina empiece a funcionar, y me pueda ofrecer varias posibilidades que me ayuden a cumplir el objetivo, este mecanismo, sin embargo, no garantiza la calidad del resultado.

Siempre creí que la "inspiración" era aquella compañera de viaje que solo se te acercaba cuando estabas en el país de la nostalgia, pero sorprendentemente, he podido constatar que no siempre es así, cambiando de idea sobre algo que durante largo tiempo había mantenido. Una vez más, me he sorprendido cambiando de idea, lo cual daría una filosófica explicación de porque nuestra cabeza es redonda, debido a la erosión que producen nuestras ideas, al cambiar bruscamente de dirección, generándonos pequeños vendavales mentales!

Supongo que por mucho tiempo que pase, por mucho que las ideas erosionen nuestra mente, la esencia de las personas permanece, esta romántica filosófica que os escribe mantendrá su particular estilo. Así que aquí dejo el primer hasta luego, o mejor dicho hasta pronto, con una frase que por varios motivos, en varios ocasiones, y sobre distintos escenarios he repetido más de lo que me gustaría.

"Mis ideas no son verdades absolutas, ni están constatadas científicamente, ni mucho menos están avaladas por ningún erudito en ninguna materia, pero son mis ideas y son validas como tal,  y lo más importante si cabe, son mías porque yo las quiero así"