Políticamente Correcto

Políticamente correcto, ese término que tanto nos gusta utilizar actualmente utilizado para describir el lenguaje, las ideas, y hechos que pretenden minimizar la ofensa, que a su vez su uso en sí ya representa una polémica.

Es un lenguaje lleno de eufemismos para que no pude sentirse ofendido ningún colectivo, utilización indiscriminada de tópicos con los que se supone todos están de acuerdo con el único fin de evitar conflictos, lo cual a mi me parece bastante irónico que el concepto más utilizado de la historia se siga aplicando en la era donde los conflictos son nuestra rutina.

Expresión que se remonta a 1973, utilizada por primera vez en la Corte Suprema de Estados Unidos, en el caso Chisholm V. Georgia, donde refiere que la frase citada no era correcta lingüísticamente, debido al estado político del momento, el término “corrección política” proviene del Marxismo-Leninismo y describe a la línea partidaria apropiada.

Por desgracia no todos aplicamos correctamente los términos “políticamente correctos”, inevitablemente personas sin demasiada cultura y educación, también se lanzan a utilizar este lenguaje evidenciando su ignorancia ante el mundo, dando lugar a absurdos textos, tipo….

“Cese temporal de la convivencia”… será que no es políticamente correcto decir que la infanta se ha divorciado!!

“Augusto Pinochet me parece un personaje que pertenece a la historia de Chile y a su modelo de transición política”… Mmmm hermosa frase de nuestro “querido” ex presidente Jose María Aznar, es lo que tienen las hemerotecas, nos dejan estos recuerdos!! Y yo me pregunto si todavía queda mucha gente que confunde la transición con el genocidio, que no es lo mismo señores no es lo mismo!!!

“Tengo la convicción moral de que fue ETA…Hay algunos datos que, en mi fuero interno, me hacen pensar que se trata de ETA (…) Yo tengo la convicción moral de que es así” Diario el mundo, Mariano Rajoy, declaraciones sobre el atentado del 11-M. Por suerte no todo el mundo tiene la misma convicción moral.
Conclusión:
Constantemente escuchamos a nuestro alrededor miles de expresiones, “políticamente correctas” que se maquillan entre la falsedad de un mundo que no se atreve a decir la verdad y un mundo que sobrevive gracias a las mentiras.